En los años 60, nuestro abuelo empezó a distribuir telas y gomaespuma. Eso nos posibilitó aprender del tema, interiorizarnos y seguir creciendo. DARRO es el primer paso de un gran recorrido que nos queda por delante. Somos familia y queremos que esa calidez llegue a cada cliente, se transmita en cada entrega, cada atención telefónica, cada mensaje y cada mail.
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